¿Qué son, tipos y qué objetivos tienen?
Se trata de ondas de carácter mecánico, no de naturaleza electromagnética, que activan una serie de mecanismos físicos basados en la mecanotransducción, por la cual se consiguen efectos tróficos, regenerativos y antiinflamatorios, a corto y largo plazo. De esta manera, se consigue una disminución/eliminación del dolor y una recuperación funcional.
Se distinguen dos tipos: ondas de presión radial, más superficiales, y ondas de choque focales, con acción más profunda e indicadas para casos concretos.
Antes de su aplicación, se debe disponer de una prueba de imagen (radiografía, ecografía, RMN) de la zona a tratar.
¿Quién las realiza?
Un profesional debidamente formado en su uso. Las focales deben ser siempre administradas por médicos.
¿En qué consiste el procedimiento?
Técnica no invasiva que consiste en aplicar el transductor con gel hidrofílico que permita la transmisión de la onda en la zona de la lesión, localizada previamente mediante una exploración física adecuada/control ecográfico. El paciente debe encontrarse en decúbito y lo más relajado posible. Los niveles de intensidad alcanzados dependerán de la tolerancia del paciente y siempre dentro de unos rangos óptimos, específicos para cada patología.
Se deben evitar realizar al mismo tiempo que otras técnicas más invasivas que supongan disrupción de la barrera cutánea.
¿Qué recomendaciones debo seguir posteriormente?
Evitar sobrecarga de la zona tratada, EVITAR ANTIINFLAMATORIOS, actitudes que aumenten el dolor, infiltraciones (desde 4-6 semanas previas y hasta 1 mes posterior).
¿Hay riesgo de complicaciones? ¿Qué tipo de problemas pueden darse?
Como todo tratamiento, no se encuentra exento de posibles efectos adversos, atendiendo también a la idiosincrasia de cada paciente, aunque se trata de una técnica muy segura y escasos efectos secundarios, derivados la mayor parte de ellos de una mala aplicación de la misma. Los más habituales comprenden: aumento transitorio del dolor, enrojecimiento transitorio de la zona, hematomas, síntomas vasovagales transitorios (mareos, malestar general, pérdida de consciencia,…). En cualquier caso, es una técnica generalmente molesta durante su aplicación pero bastante bien tolerada, rápida y cómoda.
¿Están indicadas para todo el mundo?
No, es por esto muy importante una adecuada valoración médica por un profesional debidamente formado en ellas y autorizado por la SETOC/ISMST para su aplicación.
¿Cuánto tiempo duran los efectos?
Depende de cada paciente, en la mayor parte de los casos los resultados son definitivos. En algunas ocasiones, es preciso realizar tandas de 3-5 ss con cierta periodicidad para unos resultados óptimos.